Al día de hoy es muy popular que aquellos que gozan de una terraza ya sea en casa o en su defecto en un edificio, decidan hacer un uso eficiente del espacio, y lo primero que piensan es en la construcción de piscinas.

Instalar una piscina en una terraza es excelente, tanto por el espacio como por la vista, pero deberemos acondicionar la zona para ello, por esta razón te explicaremos detalladamente cómo reforzar la terraza para poner una piscina, lo cual te será muy útil.

¿Por qué es necesario reforzar la terraza para poner una piscina?

Si estás interesado en colocar una piscina en la terraza, jacuzzi o algún tipo de balneario, es esencial que entiendas que esta tiende a ser una zona bastante endeble. Es una zona expuesta la mayoría del tiempo a las condiciones ambientales, algo que implica que colocar peso encima, sumado a otros factores, acelere el desgaste.

En este caso, lo mejor que podemos hacer antes de empezar el proyecto es reforzar la terraza. De este modo, en el momento de la construcción de la piscina de obra o de cualquier otro tipo, se harán una serie de acciones para no perjudicar la base. Si esta se encuentra en mal estado, los gastos serán mucho mayores.

Entendiendo esta problemática, deberemos sumarle además ciertos trabajos de acondicionamiento, ya que la zona de piscina es también un área de recreación, para la cual se deben adquirir ciertos artículos para la estética.

¿Cómo se puede reforzar la terraza?

Antes de empezar el proceso de refuerzo, lo primero que tendremos que calcular es el peso de la piscina, sumado al peso del agua, también hay que considerar la antigüedad de la vivienda o en su defecto las características y el estado de la estructura del edificio, además del tipo de forjado y resistencia máxima.

Según los datos que obtengamos, nuestro arquitecto o grupo de arquitectos y técnicos procederán a realizar los cálculos estructurales para determinar si podemos instalar nuestra piscina y, en todo caso, en qué puntos aplicar refuerzos.

Tipos de refuerzo

Hay que entender que la terraza será reforzada según las condiciones que considere el arquitecto. Recuerda que antes de empezar este proceso, el profesional encargado de la obra debe saber las dimensiones de la piscina, para así realizar un cálculo concreto. Además, él indicará qué tipo de refuerzo es más acorde a la estructura.

Refuerzo paralelo

Aquí empezamos con el tipo de refuerzo que se encarga de absorber parcial o totalmente la carga de peso que reciba nuestra terraza. Ten en cuenta que la mayoría de las veces no es necesario que la piscina y este apoyo funcionen como uno mismo, lo que hay que asegurar en la construcción es que pueda sostener de forma eficiente la carga a la cual se le expondrá.

El refuerzo paralelo ignora el elemento original, ya que se usará como un transmisor de carga, que de por sí es muy útil, ya que se consideraría como una estructura adicional. En otras palabras, aguantará mucho más.

Eso sí, este tipo de refuerzos generalmente son de secciones mixtas a base de acero y morteros de alta resistencia. A pesar de que el aguante es superior, son mucho más costosos y conllevan a un esfuerzo mayor para su instalación.

Refuerzo colaborante

Luego tenemos el refuerzo colaborante, que en todo caso es una sección nueva al elemento original, es decir, es un apoyo en vez de una capa adicional. El material más usado es acero a tracción mediante el uso de vigas o barras corrugadas, o en su defecto se adhieren pletinas de metales compuestos.

En términos monetarios es más barato, aunque va a necesitar una conexión mecánica o adhesión química para que tenga una eficiente transmisión de esfuerzos. Recuerda que el ingeniero en jefe va a elegir cuál es la más eficiente según la situación de tu terraza.

Importancia del cálculo

Ahora seguro te preguntas, ¿por qué es importante el refuerzo? Esto se calcula con número, una piscina de 5×3 metros con una altura de ochenta centímetros en medidas no parece grande, pero tiene una capacidad de 12 mil litros de agua, que en otras palabras serían 12 toneladas, lo que conlleva a una sobrecarga de 500 kg/m2.

La mayoría de las terrazas están diseñadas para aguantar un peso máximo de 350 kg/m2. A partir de esta medida se necesitará reforzar, para así evitar el hundimiento de la base y, por supuesto, que la piscina caiga.

Las piscinas prefabricadas tienen la ventaja de que no necesitan un acondicionamiento tan excesivo de la terraza, pero supone que debemos colocarla en cierto lugar. Antes de realizar la adquisición de algún modelo, te recomendamos que busques un arquitecto, que te podrá indicar el lugar exacto dónde podrás colocarla.

Eso sí, hay que considerar una serie de variantes adicionales. Primero, si la terraza en la cual colocaremos nuestra piscina tiene un límite de perímetro, las medidas de seguridad frente a caídas, ubicación del drenaje, entre otros, ya que cada uno de estos factores implican en dónde ubicamos la piscina y si es necesario realizar algún refuerzo.

¿De qué material se debe construir la piscina?

Las piscinas de terrazas y azoteas poseen la particularidad de estar hechas de ciertos materiales que destacan por su resistencia y peso. Esto significa que podrás buscar diseños creativos, aunque vamos a explicar cada uno seguidamente.

Poliéster reforzado con fibra de vidrio

Este es un material que está formado por una matriz polimérica y fibra de vidrio. Además cuenta con una resina que aporta una gran resistencia al medio ambiente y los químicos que tienden a ser usados en la piscina, ya sea por motivos estéticos o por mantenimiento.

Se puede considerar como uno de los materiales más resistentes debido a que ambos compuestos actúan entre sí para fortalecerse el uno al otro. Una de las ventajas es que es muy ligero, así que podrá cargarse con facilidad, además que estabiliza las temperaturas sin problema alguno. Eso sí, el problema es que está limitado en medidas y modelos.

Acero inoxidable

Luego tenemos las piscinas de acero inoxidable, que son las mejores en el mercado. En primer lugar porque resisten de forma excelente al agua, además que se adaptan a cualquier tipo de suelo o forma. Ten en cuenta que hay algunas que son prefabricadas y otras que son de obra, pero siempre tendrás asegurada la calidad.

Una de las ventajas de este material para una piscina en la azotea, es que es capaz de resistir grandes presiones de agua, las terminaciones de la piscina no tendrán jamás un remache o soldadura, además es inalterable a vibraciones, cambios de temperatura, etc.

Además, las piscinas de acero inoxidables son fáciles de limpiar, no son porosas y el material es reciclable.

Lo que debes saber es que no es recomendable utilizar químicos constantemente porque llegan a oxidar el metal, eso significa construir una nueva piscina, perdiendo en totalidad el dinero invertido.

Hormigón proyectado

También conocidas como una piscina de gunite, son aquellas que aprovechan la alta presión del hormigón. Este material se adhiere con facilidad a las paredes y el suelo, de modo que permite construir sobre el mismo sin riesgo alguno de deterioro.

Dentro de las ventajas es que es el material más económico de los tres, tiende a contar con una buena impermeabilidad y estanqueidad, pero no controla las temperaturas. En este caso, se necesitará ayuda externa, eso sí, te aseguramos que jamás se te hundirá tu terraza si usas una piscina de este material.

Ahora te vamos a dar un consejo de mucha utilidad: no importa si el material de tu piscina es poliéster reforzado, acero, entre otros, siempre para las terrazas utiliza un sistema de doble vaso, que funciona como un recipiente que contiene todo el agua, pero además tendrás una capa inferior que se asegurará que no haya filtraciones hacia la vivienda.

Si te encuentras una filtración proveniente de la azotea, por pequeña que sea, te recomendamos que llames a un profesional.

En todo caso, lo mejor que puedes hacer es revestir la otra capa con una baldosa de porcelana o en su defecto algún material como gresite o liner, sumado a unas soldaduras de alta frecuencia.

¿Puedo construir una piscina en la terraza de un bloque comunitario?

Si vives en una comunidad, se entiende que la terraza es un bien común de todos los propietarios, eso significa que una construcción o modificación de la zona deberá estar sometida a una serie de factores:

• Lo primero es que deberás reforzar la terraza para poner la piscina, el gasto será totalmente tuyo a pesar de que estés en una zona compartida, de hecho, es posible que el espacio que intentes utilizar sea pequeño, así que te recomendamos que tomes la decisión, siempre y cuando las dimensiones estén a su favor.
• En los bloques comunitarios existe la posibilidad de que la más mínima filtración conlleve a perjudicar a un tercero, eso significa que todo daño deberás pagarlo, ya que es ocasionado por una obra tuya, desde un hundimiento o en su defecto, la ruptura de alguna toma de agua. Te aconsejamos que amplíes la cobertura del seguro de tu hogar, para así poder costear cualquier posible problemática.
• Por supuesto, tendrás que contar con un permiso de obras del ayuntamiento de tu ciudad o localidad, ya que esto es lo que te permitirá realizar cualquier modificación en áreas comunes. Es posible que también debas conseguir la aprobación de la comunidad de vecinos y negociar con los mismos el proyecto.

¿Cuánto cuesta reforzar la terraza para poner una piscina?

Ahora que sabes cómo funciona el proceso, entiendes que un técnico hará los cálculos, explicará la viabilidad del proyecto, indicará cuál es la zona en la cual puedes colocar tu piscina, conseguir los permisos del ayuntamiento y los vecinos, de seguro te preguntas, ¿cuánto dinero deberé gastar?

Debes saber que, sin considerar el tipo de material o algún diseño en específico, vamos a brindarte unas medidas básicas, para una piscina de 3 metros cuadrados, con ochenta centímetros de profundidad, te recomendamos tener aproximadamente 15.000 euros.

Eso sí, hay que sumarle un condicionante adicional y es cómo vas a subir los materiales, ya que hay ocasiones que es necesario el uso de grúas. Alquilar una por un proyecto de este tipo es bastante costoso, además considera si quieres añadirle iluminación y otros elementos estéticos; en dicho caso, la cifra podría llegar a ascender a unos 20.000 euros.

Una excelente opción es que te decidas por las piscinas pequeñas para terrazas, son muy accesibles e ideales para esa parte de tu hogar. Recuerda que lo más importante es asesorarte con especialistas.

En Luxos Spas nos dedicamos a la fabricación y venta de piscinas convencionales, para terrazas, y mucho más, a la medida y con los mejores materiales.

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